Fe; Fortaleza; Esperanza; Dependencia; Espíritu Santo; Autocontrol; Alegría: ¡Todo lo puedo en Cristo que me fortalece!

Hermanos comparto con ustedes algunos de los versículos más hermosos e inspiradores de la palabra de nuestro Señor Jesucristo. Los invito más que nunca a creer de todo corazón en la palabra de Jesús. Pido encarecidamente a todo hermano que lea estas líneas una oración sincera, que provenga del fondo de su corazón, por mí, que estoy pasando dificultades, así como también ustedes están pasando por las mismas cosas: tal vez acosados por algún pecado, por deudas, por el mundo, oprimidos por el diablo en diversas pruebas y circunstancias. Como sea que se encuentren en este momento, les propongo: oremos unos por otros, levantemos nuestros corazones y las palmas de nuestras manos a Dios en el cielo. Oremos sí, busquemos la intercesión de Cristo nuestro abogado, que está a la diestra de Dios, en su Trono de Gloria. Resistamos al mal y a las obras de las tinieblas. La oración de la Iglesia unida, de todos los santos unidos en el poder del Espíritu de Cristo traerá sanación interior y libertad. Yo también siento temor, quiero confesarlo, ante Dios no miento, siento miedo y ansiedad ante las grandes dificultades de la vida y las pruebas a las que nos vemos sometidos. Mas me aferro a Cristo, clamo, como aquél padre desesperado que, gritando dijo:

¡Creo: ayúdame a creer más en ti! (Marcos 9:24)

No se avergüencen hermanos míos, Jesucristo conoce nuestros corazones, Él sí sabe lo que pensamos y sentimos.

¡Aférrense a Cristo!

Él es nuestra esperanza y nuestro sostén. Oremos unos por otros, busquemos a Dios y a Jesucristo de todo corazón. No te pido dinero, ni lisonjas, ni nada humano o corrompido, sino una oración sincera por mí, así como yo, oro en el Espíritu también por ti. Dios te Bendiga con su paz, con su espíritu, su presencia, su amor eterno. Amén.
Fernando Daniel Acuña Pintos.
Montevideo: Uruguay.
Efesios 3: 14-19
Por esta causa doblo mis rodillas ante el Padre de nuestro Señor Jesucristo, de quien toma nombre toda familia en los cielos y en la tierra, para que os dé, conforme a las riquezas de su gloria, el ser fortalecidos con poder en el hombre interior por su Espíritu; para que habite Cristo por la fe en vuestros corazones, a fin de que, arraigados y cimentados en amor, seáis plenamente capaces de comprender con todos los santos cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura, y de conocer el amor de Cristo, que excede a todo conocimiento, para que seáis llenos de toda la plenitud de Dios.
Isaías 40:31
Pero los que confían en el Señor
renovarán sus fuerzas;
volarán como las águilas:
correrán y no se fatigarán,
caminarán y no se cansarán.
Isaías 41:10
Así que no temas, porque yo estoy contigo;
no te angusties, porque yo soy tu Dios.
Te fortaleceré y te ayudaré;
te sostendré con mi diestra victoriosa.
Efesios 3: 20-21
Y a Aquel que es poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos, según el poder que actúa en nosotros, a él sea gloria en la iglesia en Cristo Jesús por todas las edades, por los siglos de los siglos. Amén
2 Timoteo 1:7
Pues Dios no nos ha dado un espíritu de timidez, sino de poder, de amor y de dominio propio.
Gálatas 5:22-23
En cambio, el fruto del Espíritu es amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, humildad y dominio propio. No hay ley que condene estas cosas.
Romanos 12:12
Alégrense en la esperanza, muestren paciencia en el sufrimiento, perseveren en la oración.
Juan 16:24
Hasta ahora no han pedido nada en mi nombre. Pidan y recibirán, para que su alegría sea completa.
“Jesucristo mi Dios y mi Rey, quiero levantar mi corazón y mi espíritu a ti en los cielos y pedir por este hermano amado que está leyendo estas líneas ahora. Pido de todo corazón por él, que tú traigas a su vida libertad, sanación de toda forma de opresión del enemigo y una apertura ancha de las puertas de la prisión del miedo, temor, ansiedad, preocupación, incredulidad. Satanás se ha esforzado mucho en levantar fortalezas en nuestras mentes durante muchos años. Así, nos quiso amoldar a su sistema de cosas y por años nos mantuvo prisioneros y esclavos suyos. Por eso hoy te pido Padre Celestial y Bendito, tu intercesión ante el Dios Soberano: Jehová de los Ejércitos. Danos la victoria sobre todos nuestros enemigos, sana nuestros corazones afligidos, cambia y transforma nuestras mentes para que, renovados en tu Poder, podamos resistir a satanás y a toda su hueste de maldad. Haznos vivir sobriamente y ser cuidadosos en la oración. No nos dejes estar inactivos en tu gracia, sino renueva nuestras fuerzas cada día, para que, unidos a Ti, llevemos mucho fruto. Padre: Jesucristo mi único Rey: Sálvanos de este presente oscuro y de tinieblas. Bendice a Tu Iglesia, cuídala y protégela de toda maldad que se trame contra ella.

Jesucristo: ¡Te amo con todo mi corazón!

Perdónanos los años en que vivimos en ignorancia y oscuridad. Tú eres nuestra luz. Ilumínanos y por Ti veremos la Luz. Amén.”
Bendiciones en Cristo Jesús a todos los hermanos de Fe esparcidos por el mundo. Cristo vuelve pronto. Estén preparados y unidos en amor. Amén.

Avatar de Desconocido

About Fernando Acuña

Deseo compartir esta Información con el mayor número posible de personas. No persigo ninguna finalidad lucrativa ni sectaria... Mi único interés, es dar a conocer esta gran revelación. Que Dios los bendiga a todos ustedes que visitan esta página.
Esta entrada fue publicada en el testimonio del espíritu santo, Espiritual, General, la mente de cristo, Reflexiones, Reflexiones Espirituales, Religión, Teología y etiquetada , , , , , , , , , , , , , , , , , , . Guarda el enlace permanente.

Deja un comentario